Desde su lanzamiento al mercado, hace casi 25 años, el viagra ha sido un éxito en ventas por ayudar a revivir la vida sexual de muchos hombres con disfunción eréctil. Sin embargo, hoy en día personas completamente sanas también consumen la llamada pastilla azul sin reparar en sus efectos secundarios.
Si estás pensando en hacerlo, debes leer esta información antes de tomar un riesgo innecesario.
¿Cómo funciona?
El componente activo de esta píldora es el sildenafilo, que aumenta el flujo de sangre hacia el pene para lograr y mantener una erección con la rigidez suficiente como para tener relaciones sexuales.
Su consumo debe realizarse hasta cuatro horas antes de tener relaciones sexuales o mínimo en los 30 minutos previos, ya que solo funciona si la persona es estimulada sexualmente.
El laboratorio Pfizer, creador del fármaco, advierte que la pastilla azul sólo debería tomarse bajo supervisión médica, pues además de que en muchos países sólo puede comprarse con receta, su ingesta puede provocar efectos secundarios que van de leves a graves, los cuales describimos a continuación.
Efectos secundarios más comunes
Pfizer afirma que sólo uno de cada 100 usuarios de la pastilla presentan efectos secundarios. Entre los más habituales y poco conocidos están:
- dolor de cabeza
- rubor facial
- malestar estomacal
- visión anormal o borrosa
- congestión y secreción nasal
- dolor de espalda
- dolor muscular
- náuseas
- mareos
- erupción
Efectos secundarios graves
- Una erección prolongada (priapismo): Si la erección dura más de cuatro horas se debe acudir al médico de inmediato, ya que esto puede producir un daño permanente al pene.
- Pérdida repentina de la visión en uno o ambos ojos: Esto puede ser señal de un problema ocular grave llamado neuropatía óptica isquémica anterior no arterítica.
- Disminución o pérdida repentina de la audición. Algunas personas también pueden experimentar un zumbido en los oídos o mareos.