La semana pasada, en la revista Pediatrics apareció un artículo de opinión que arroja un poco de luz al tema del regreso a clases en medio de la pandemia. El documento argumenta que los niños raramente transmiten el virus y que, si las instituciones educativas siguen las recomendaciones de seguridad y vigilan los índices de contagio en sus regiones, es posible inaugurar un nuevo ciclo escolar presencial. Cabe mencionar que se trata de una revista científica oficial revisada por pares dependiente de la Academia Americana de Pediatría, en los Estados Unidos.
Estudios sobre la transmisión de Covid-19 en niños.
Los encargados de redactar el artículo son los médicos especialistas en enfermedades infecciosas pediátricas Benjamin Lee y William V. Raszka, que laboran en la Universidad Larner y la Universidad de Vermont, respectivamente. Las conclusiones de estos médicos se basan en un estudio reciente, publicado por la misma revista, y otros cuatro que investigan la forma en que la Covid-19 se transmite entre niños.
Uno de estos estudios, hecho en Suiza, dio seguimiento a 39 niños enfermos de Covid-19. La investigación reveló que sólo en el 8% de los casos los niños resultaron sospechosos de ser el primer caso en la familia.
En China, un nuevo estudio de seguimiento a la transmisión reveló que, de 68 niños con coronavirus internados en el mismo hospital, 96% se contagió en casa de adultos ya infectados. Otro estudio en este país reveló que el 90% de los menores de edad estudiados, internados en diversos hospitales, se contagió de un adulto y sólo confirmaron una transmisión posible de un niño a otro.
Otro estudio en Francia dio seguimiento a un niño enfermo de Covid-19 que estuvo en contacto con 80 compañeros en tres escuelas diferentes. Nadie más enfermo. De hecho, otras enfermedades respiratorias como la gripe mostraron mayor prevalencia en las escuelas.
En Australia, un estudio reveló que 9 estudiantes y 9 trabajadores infectados en 15 escuelas distintas expusieron a 735 estudiantes y 128 adultos al nuevo coronavirus. Sólo detectaron dos contagios, y una transmisión de adulto a niño.
El regreso a clases es posible en la pandemia.
Los investigadores también señalan que están impresionados con los datos. “La conclusión principal es que los niños no son foco de la pandemia. Después de seis meses, la información recolectada revela que los niños tienen menor probabilidad de infectarse y aparentemente son menos infecciosos. Son los adultos, quienes no siguen los protocolos de seguridad, los responsables por el crecimiento de la curva”.
Los últimos modelos matemáticos también sugieren que los niños no funcionan como diseminadores significativos de la enfermedad. De hecho, en estas estimaciones se observó que usar cubre bocas y aplicar un estricto distanciamiento físico resulta mucho más eficaz a la hora de contener la propagación de la enfermedad que cerrar escuelas. Esto parece confirmarse en Japón y Europa, donde las escuelas reabrieron sin un aumento significativo de casos. En opinión de los médicos, estos casos confirmarían los modelos.
Los investigadores concluyen argumentando que la reapertura de las escuelas, siempre que se haga con seguridad, es fundamental para que los niños se desarrollen saludablemente. “Al hacerlo podríamos minimizar los costos sociales, de desarrollo y salud potencialmente adversos que nuestros hijos seguirán sufriendo hasta que un tratamiento o vacuna eficaz surja y se distribuya, o hasta que alcancemos la inmunidad de grupo”, dicen los autores.
¿Qué opinas? ¿En base a lo que mencionan los expertos te parece oportuno un regreso a clases?