Togbe Ngoryifia Cefas Kosi Bansah, también conocido como el Rey Bansah de Hohoe, es un auténtico monarca africano que no cree en los métodos anticuados de gobierno. El hombre prefiere vivir en Alemania y gobernar a sus súbditos por Skype.
Curiosamente, al Rey Bansah se le nombró sucesor al trono en 1987, cuando murió su abuelo. Togbe fue elegido por encima de su padre y su hermano mayor, simplemente porque ambos eran zurdos, un “defecto” que aparentemente la cultura de Hohoe considera impuro y como una señal de deshonestidad.
La ceremonia de coronación tuvo lugar en 1992, pero el Rey Bansah decidió no regresar a África. Todavía reside en Ludwigshafen, muy cerca de la ciudad de Frankfurt, con su esposa alemana Gabriele, donde trabaja en una tienda de reparación de automóviles y se da tiempo para gobernar a los 200,000 ciudadanos de Hohoe, en el sudeste de Ghana, a través de llamadas por Skype y por teléfono.
Según lo publicado por la prensa, se queda despierto hasta muy noche para resolver disputas tribales y hace el intento de visitar su reino, por lo menos, seis veces al año.
Aunque se quedó a vivir en Alemania, no permitió que la distancia fuera un problema para cumplir sus deberes como rey. Hizo extensivas campañas en nombre de su país y ayudó a garantizar la asistencia médica internacional en la zona. También suele enviarles equipos de purificación de agua con bastante regularidad.
El Rey Bansah se convirtió en noticia recientemente debido a un robo que tuvo lugar en su hogar. Él, aparentemente, regresó de una noche de fiesta para descubrir que los ladrones habían saqueado su casa, llevándose cuatro de sus coronas de oro.
Varios otros accesorios reales, incluyendo algunas cadenas de oro que pertenecían a sus abuelos, desparecieron también. Los ladrones subieron hasta un balcón en el primer piso, donde una puerta estaba abierta, entonces rompieron los armarios y se llevaron todo lo que pudieron