Al menos 17 personas en las provincias de Henan, Hebei y Zhejiang, China, quedaron detenidas luego de un operativo en el que se descubrieron más de 500 mil cajas de condones falsos y algunos usados, con un valor total de 900 mil euros (20 millones 982 mil 52 pesos), que estaban a punto de comercializarse.
Autoridades de Zhenjian confirmaron que los materiales eran simples y rudimentarios, totalmente por debajo de los estándares oficiales de fabricación, lo que suponía un gran riesgo para la salud pública. Más grave aún que portaban nombres de marcas comerciales como Durex, Jissbon y SixSex, informa The News Time.
"Normalmente la fabricación de condones, categorizado como un dispositivo médico que tiene contacto directo con el cuerpo humano, implica la esterilización y las pruebas electrónicas de agujeros y puntos delgados. Pero en esos talleres ilegales, que a menudo están muy sucios, es improbable que tengan los métodos correctos para controlar el nivel de bacterias y hongos o realizar pruebas de agujeros", afirma Chen He, gerente de Daxiang.