Dado que Jesucristo prometió a sus discípulos volver para llevarlos al lado de su padre, esto según Juan 14:1-4, entre los seguidores de la fe cristiana existe la idea de que el mesías regresará al mundo terrenal. Es una idea de la que se han aprovechados muchos para hacerse de fieles y obtener beneficios, principalmente económicos y sociales. El fotógrafo Jonas Bendiksen se dio a la tarea de recorrer el mundo documentando a estos supuestos mesías.
“No crecí en un ambiente religioso, pero quería conocer el rostro de la fe. Mi composición siempre fue la de un esclavo de la racionalidad y de la función, por eso, cuando me encontré con estos hombres, me resultó irresistible; yo podría hablar con Jesús, tocarlo y sentirlo. Se convirtió en algo tangible”.
El primer mesías del que Jonas tuvo conocimiento fue un hombre llamado Vissarion en Siberia. Tras una ardua investigación encontró a Jesús de Kitwe, en Zambia, a Moisés Hlongwane en Sudáfrica, a Jesús Matayoshi en Japón y a Inri Cristo en Brasil. Cada uno de estos personajes dedica por completo su vida a su creencia, algunos tienen miles de seguidores y otros unos cuantos. Jonas fue a vivir entre estos discípulos para documentar los rituales de su vida cotidiana.
Evidentemente existen elementos de humor en su trabajo, pero enfatiza que le resultó vital y que jamás fue algo impuesto. Según el fotógrafo, el aspecto más inesperado del proyecto fue que ninguno de estos “mesías”, o sus seguidores, cuestionaron los motivos de Jonas.
“Nadie estaba interesado en lo que yo estaba haciendo”, se ríe. “Aceptaron mi interés, pero no les importaba la historia que estaba contando. Nadie me preguntó lo que yo creía, o lo que pensaba. No intentaban convertirme de forma agresiva, no había presión. Todos eran muy abiertos y flexibles, sorprendentemente”.
Estás fotografías forman parte del libro “The Last Testament” (El último testamento, en traducción libre).
LE FALTO ESTE INFELIZ LOCO MESIAS DE LOS CHAIROS: