Al nacer, Shivam Kumar, tuvo la peculiaridad de hacerlo con una extraña extensión de piel en su espalda baja, aspecto que más tarde lo llevaría a ser considerado como un dios en su tierra.
La particular del menor de seis años asemeja una "cola" y su caso es tan llamativo entre los pobladores que su padres decidieron ocultarlo en medida de lo posible.
Y es que al verlo, la gente lo colma de chocolates y botanas con tal de agradarlo.
Además de la cola, la gente piensa que Shivam es una deidad por el inusual cabello que le crece en su dorsal, multitudes lo ven y regalan flores al creer que es una reencarnación de "Hanuman", poderoso dios mono de la mitología hinduista.
El crecimiento de cabello en la espalda del menor desconcertó tanto a médicos como a los padres del niño, no obstante, Reena, su madre, se rehusa a rasurarlo pues piensa que "traerá mala suerte a la familia".
Medios locales reportan que las visitas al menor de edad no cesan por ello un gurú aconsejó a los papás que no dejarán que las personas fueran a venerarlo como un dios, pues podría repercutir al futuro de Shivam.
A partir de ello, la vida del niño se hizo más normal, aunque sus vecinos aún lo visitan.
Reena resalta que Shivam "no tiene nada malo" y que tiene salud perfecta ya que su cola es "un regalo de Dios".