martes, 12 de abril de 2022

Josephine Baker



 Nació a principios del siglo XX en un pueblo de Missouri en EEUU, un mal momento y un peor lugar. A los 7 años, Josephine Baker ya trabajaba para ayudar a su madre y dormía en un caja de madera en el sótano de su empleadora.

Eran tiempos brutales para la gente de color. A los 11 años presenció la masacre de San Luis. En julio de 1917 los blancos asesinaron centenares de negros, y quemaron sus casas. Ella y su madre se salvaron, pero vieron morir muchos Amigos, unas imágenes que nunca olvidaría. 

A los 14 años, y a pesar de su Madre, se unió a un trío de artistas callejeros y salió de gira por todo el país hasta llegar a Broadway, donde tuvo algún reconocimiento como bailarina.

Fue así que recibió una oferta desde París, la Capital del espectáculo y se convirtió en la

estrella absoluta del show la Revue Nègre, un número cargado de exotismo a ritmo del jazz de Sidney Bechet, y ella en poco tiempo conquistó Francia. Como reina del Folies Bergère, fue amiga de Picasso y Hemingway.





Ya consagrada, regresó a EEUU en 1935, pero las cosas no habían cambiado mucho.

Casi nadie fue a recibirla, los medios la atacaron y no lograba que ningún teatro aceptara sus shows.

Volvió a Francia, donde tomó la ciudadanía, prometiendo no regresar a EEUU.

Retornó con sus espectáculos.

Cada noche al finalizar, recorría los refugios para llevar comida a gente sin hogar.

Con la ocupación nazi a Francia, se hizo Agente de la Resistencia. Ser una figura pública le permitía desplazarse por Embajadas y círculos de poder y obtener información. En Casablanca colaboró con una red que permitía la huida de judíos a Sudamérica y también fue voluntaria de la Cruz Roja como enfermera. A principios de los 50' lo volvió a intentar en EEUU, y ahora además de la segregación, sufrió la etiqueta de "comunista" en pleno Macartismo, y el rechazo de la misma Comunidad Negra que la veía demasiado independiente. Decenas de hoteles le negaron la entrada, su visa fué cancelada y debió abandonar el país.

El Château des  Milandes en Francia, albergó a su Tribu del Arcoiris. Doce Niños que ella adoptó de distintas nacionalidades, para demostrar que la Convivencia siempre es posible, más allá de razas.



A comienzos los 60' fue rehabilitada y pudo volver a los EEUU y fué la única Mujer que habló ante más de 300.000 personas, junto a Martín Luther King, cuando dijo Yo tengo un Sueño.

Condecorada con la Legión de Honor, Defensora de los Derechos Civiles, y Bisexual, un día como hoy de 1975 se marchaba ésta Leyenda.



Nota cortesía de Escoria 24 acá el Estilista Canino. 



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