Encuentran anillo del Imperio romano con imagen de Jesús

 Un equipo de arqueólogos de la Autoridad de Antigüedades de Israel (IAA) localizó un milenario tesoro conformado por cientos de monedas de plata y bronce. Además, durante las exploraciones de los antiguos naufragios en las costas de Cesarea surgieron anillos de plata y oro, piedras raras y diversas figuras. 

La embarcación más antigua naufragó hace más de 1,700 años, en el periodo Romano. Mientras tanto, el otro barco se hundió hace 600 años durante el dominio mameluco.

Tanto los cascos como las cargas de las embarcaciones naufragadas estaban dispersas a una profundidad aproximada de cuatro metros. «Probablemente las embarcaciones atracaron en las cercanías y fueron arrastradas por una tormenta», especulan los arqueólogos. Entre los tesoros localizados se encuentran cientos de monedas romanas de plata y bronce acuñadas a mitad del siglo III d.C. Y también un montón de monedas de plata que circularon durante el dominio mameluco.

Entre los objetos localizados destacan unas estatuillas de tiempos romanos, la primera con la forma de un águila y la segunda una máscara cómica de teatro. En el sitio de la excavación también se descubrieron campanas de bronce, clavos, piezas cerámicas, tubos de plomo y un ancla de hierro.

Monedas de bronce de un antiguo naufragio en la costa de Cesarea, Israel. Imagen: Dafna Gazit, IAA.

El anillo del Buen Pastor.

Sin embargo, el hallazgo más «raro» que provocó emoción entre los arqueólogos es un anillo de oro del Imperio romano. Y es que la pieza muestra una imagen empleada por los primeros cristianos para representar a Jesús. «Otro hallazgo raro y exótico es un anillo de oro grueso en formato octagonal con una piedra preciosa sobre la que tallaron la figura de un joven pastor que porta una túnica y carga una oveja al hombro», especificó uno de los investigadores.

Anillo de oro octogonal decorado con una piedra preciosa verde donde tallaron la figura del «Buen Pastor».

«Esta imagen del «Buen Pastor» es una de las primeras y más antiguas empleadas en el cristianismo para simbolizar a Jesús», dicen en el comunicado. «Es la representación de un Jesús compasivo, que extiende su generosidad no solo a los creyentes sino a toda la humanidad». Los arqueólogos se aventuraron a decir que este anillo perteneció a un «cristiano primitivo».