Emanuela Orlandi, una joven de 15 años hija de un funcionario del Vaticano, se vio por última vez tras presentarse a una clase de música en Roma el 22 de junio de 1983. Durante todos estos años, las teorías que surgieron en torno a la desaparición, particularmente aquellas que abordan un supuesto vínculo entre los sacerdotes y el inframundo criminal en el Vaticano, se fueron acumulando y ganaron un inesperado impulso a últimas fechas. Independientemente de si fue la mafia o un grupo de pedófilos al interior del Vaticano, los principales sospechosos tras la desaparición de Emanuela Orlandi hacen que esta historia sea verdaderamente escalofriante.
Por primera vez en casi cuarenta años, las autoridades podrían tener pistas prometedoras sobre el destino final de Orlandi, pues su cadáver jamás se encontró.
Nueva evidencia en el caso de desaparición de Emanuela Orlandi.
Laura Sgro, la abogada que lleva el caso de la familia Orlandi, recibió en 2018 un inquietante mensaje anónimo acompañado con la fotografía de una cripta bajo el Vaticano, así como la frase “observa a donde apunta el ángel”, haciendo referencia a una escultura de mármol que se encuentra sobre la tumba en cuestión.
Esta información terminó llamando la atención de la cúpula en el Vaticano, e incluso el portavoz Alessandro Gisotti tuvo que hacer referencia al caso para mantener la diplomacia en la situación. “Les confirmo que se recibió la carta de la familia de Emanuela Orlandi”, dijo Gisotti, “y se estudiarán las solicitudes presentadas”.
El ángel mencionado en la carta anónima se ubica sobre una lápida donde descansan los restos de un príncipe alemán nombrado arzobispo en 1857 por el papa Pío IX, supuestamente ahí también se encuentran los restos de su cónyuge. La tumba pertenece a un cementerio alemán bajo el Vaticano, y esta figura angelical tallada en mármol sostendría una tableta grabada en latín con la oración “Descanse en paz”.
Pistas anónimas.
Sin embargo, el misterio del Vaticano resulta todavía más intrigante tras descubrirse, mediante una serie de pruebas científicas, que la tumba fue abierta al menos una vez. Además, también se reveló que la fecha tallada sobre la tableta que sostiene el ángel difiere a la que se encuentra sobre la lápida.
Resulta evidente que alguien tiene un interés muy especial en que los investigadores se dirijan a esta cripta. El propósito, los fines y la conclusión de esta carta anónima todavía tendrán que ser revelados. En un escrito dirigido al Vaticano, Sgro señaló haber logrado “confirmar que algunas personas sospechan que los restos de Emanuela Orlandi fueron escondidos en este cementerio alemán”.
Además, existe evidencia adicional de que visitantes desconocidos visitan regularmente esta tumba en particular, pues dejan flores como una señal de que deberían seguir las recomendaciones contenidas en el anónimo.
Las teorías en torno a la desaparición de Emanuela Orlandi.
La desaparición y presunta muerte de Emanuela Orlandi en 1983 ha acumulado multitud de teorías en todo este tiempo, así como toda clase de motivos que sustentan estas especulaciones. Dado que el Vaticano y sus inmediaciones funcionan como el centro neurálgico tanto para la religión como para la mafia, las teorías en torno a la desaparición de la joven toman elementos de ambos mundos.
La teoría de la mafia.
Muchos creen que Emanuela Orlandi se convirtió en víctima de un jefe de la mafia, quien tomó la decisión de secuestrar a la hija de un miembro de la policía del Vaticano para sobornarlo y obtener algún tipo de beneficio. Otra teoría apunta a que este grupo mafioso cedió un préstamo a personal del Vaticano y habrían utilizado a Orlandi como garantía para recuperar el dinero.
Por otro lado, algunos sugieren que la joven fue tomada como rehén para obligar a los oficiales a liberar a Mehmet Ali Agca, un turco que intentó asesinar al papa Juan Pablo II en 1981.
Sin embargo, cabe aclarar que esta no es la primera ocasión en que se divulga información clave y prometedora sobre el destino de Orlandi. En 2005, durante la emisión de un programa televisivo en Italia, una persona desconocida hizo una llamada asegurando que las pistas sobre el destino de Emanuela Orlande se encontraban en la tumba de Enrico De Pedis, en su época una figura criminal muy respetada en el bajo mundo romano.
De Pedis murió asesinado en 1990 y fue sepultado en una de las iglesias de mayor prestigio en Roma: la basilica di Sant’Apollinare. En este lugar descansan varios cardenales y miembros importantes del Vaticano. Los oficiales tomaron nota y decidieron exhumar el cadáver del criminal. Sin embargo, los hallazgos jamás fueron divulgados.
Víctima de trata de blancas.
Por otro lado, entre las teorías más perturbadoras figura el supuesto contubernio entre el Vaticano, la policía local y los legisladores regionales para secuestrar jóvenes como Emanuela Orlandi y convertirlas en prostitutas. Esta trata de blancas, según la teoría, contaría con la colaboración de agentes en otros países.
Aunque parece una locura, esta acusación no puede descartarse tan fácilmente pues fue elaborada por Gabriele Amorth, el exorcista más reconocido del Vaticano nombrado por el propio Juan Pablo II. Según las declaraciones de Amorth, Orlandi fue abusada sexualmente, asesinada y su cadáver ocultado.
“Se trató de un crimen con motivo sexual”, mencionó. “Un gendarme del Vaticano actuaba como reclutador de jóvenes y organizaban fiestas. Esta red incluía personal diplomático de una embajada ajena a la Santa Sede. Creo que Emanuela fue víctima de este grupo”.
El futuro del caso.
Pese a todo el misterio y las supuestas pistas, nadie ha llegado a presentar una prueba fehaciente de estas teorías, por lo que el paradero de Emanuela Orlandi y lo que le sucedió aquel año de 1983 siguen siendo un misterio. Desde su desaparición hace 36 años, la familia ha sido víctima de toda clase de insinuaciones y reclamos. En octubre de 2018, cuando el Vaticano encontró restos humanos no identificados en su propiedad, los Orlandi se mantuvieron a la expectativa, pero terminaron decepcionados al saber que eran de otras víctimas.
Por ahora, el Vaticano estudia la posibilidad de abrir la tumba del príncipe alemán, y es que están muy conscientes de la presión pública que tienen encima. Si llegan a encontrar algo importante bajo esta tumba, un misterio que ha intrigado a multitudes durante décadas finalmente podría llegar a su fin.