Un novedoso procedimiento que promete llenar de orgasmos la vida de las mujeres está causando gran controversia a nivel mundial, pero eso no ha impedido que algunas lo prueben y se enamoren perdidamente. El procedimiento consiste en aplicar una inyección en el centro del placer femenino, el clítoris.
La revolucionaria técnica creada por el doctor Charles Runels inyecta sangre de la paciente previamente extraída de uno de sus brazos, en el clítoris y las paredes vaginales. Por supuesto, antes de llegar a este punto, la sangre pasa por un tratamiento especial de centrifugado que separa el plasma rico en plaquetas que son las protagonistas del método.
Runels asegura que con esto las mujeres son capaces de aumentar su sensibilidad en el área genital, su líbido y la calidad y potencia de sus orgasmos.
Historias de 'séxito'
Aunque el tratamiento que el doctor probó por primera vez como un regalo de San Valentín para su novia aún no tiene pruebas que demuestren su efectividad, las primeras pacientes en someterse a él han dado testimonios sobre las mejoras que su vida sexual ha tenido.
Una de ellas es Sophie Blackman quien acudió al médico porque durante su vida sexual activa no había conseguido tener ni un orgasmo.
La inyección que ella asegura le permitió llegar al clímax por primera vez, le costó casi 3 mil pesos (mil 200 libras esterlinas), pero asegura que por un año de ver las estrellas, vale la pena.