2018 fue un año repleto de descubrimientos fantásticos; sin embargo, no faltaron aquellos actos rebosantes de absoluta estupidez. Las siguientes historias tienen como protagonistas a personas galardonas con los infames premios Darwin, un trofeo reservado a todos aquellos que contribuyen a la evolución humana incluyéndose a sí mismos en el grupo de los genes destinados a morir, o a casi hacerlo, a causa de su propia ignorancia.
Claro, varios de estos premios Darwin son producto de la mala suerte, pero la mayoría son el resultado de nada más que estupidez humana. A pesar de todo, tenemos que agradecer a estos sujetos por garantizar que, de la humanidad, solo persista lo mejor.
El sospechoso de homicidio detenido tras enviar mensaje de texto a los detectives.
El galardonado con este premio Darwin es un sujeto destrozado por la culpa. Hablamos de David Romig, un hombre de 52 años residente de Florida del Sur que se encuentra bajo investigación por el asesinato de Sally Kaufmann-Ruff, una mujer de 64 años, que en vida fuera pareja sentimental de Romig, encontrada por los paramédicos con un disparo en la cabeza en enero de 2018.
La declaración inicial de Romig señalaba que se encontraba durmiendo al lado de Kaufmann-Ruff cuando alguien irrumpió en su vivienda. Aseguró que la mujer había recibido el disparo durante el altercado con el supuesto intruso. Sin embargo, la información proporcionada por el sujeto resultaba inconsistente con la evidencia desde un principio.
Las sospechas no hicieron más que aumentar cuando los detectives empezaron a recibir mensajes de texto sobre el caso, esto último fue lo que le valió a Romig el premio Darwin.
“Creo que me van a arrestar”, podía leerse en los primeros dos mensajes.
Tras ser interrogado sobre los motivos de estos mensajes, Romig terminó admitiendo ante la policía que había asesinado a su novia durante una experiencia extracorporal. Además de la declaración, los análisis de ADN a una pipa de metal y una colilla de cigarro (que de acuerdo con nuestro sujeto pertenecían al asesino) mostraron al verdadero culpable: David Romig.
Durante los interrogatorios, los detectives se enteraron que habían recibido los mensajes de texto por equivocación, pues el destinatario original era la esposa de Romig. Tras haber sido interrogado por primera vez por la policía, envió un mensaje de texto a su esposa comentándole que alguien había ingresado a su residencia y matado a su novia. Pero también señaló que temía haber hecho algo que no podía recordar.
Romig dijo a los investigadores que periódicamente padecía episodios de amnesia durante el día, y a menudo no podía recordar lo que había hecho. Aseguró también que ya había tenido “experiencias extracorporales”, como la que tuvo la mañana en que murió su novia.
La policía tomó muy en cuenta el hecho de que Romig era el único beneficiado por el seguro de muerte de la señora Kaufmann-Ruff, cuya indemnización ascendía a los US$ 200 mil.
Alrededor del mundo, 259 personas murieron a causa de una “selfie”.
La fiebre de las fotografías en las redes sociales ha llevado a multitud de individuos a cometer auténticas locuras, por eso decidimos otorgar un premio Darwin a las más de doscientas cincuenta personas que terminaron muertas a causa de una selfie.
La cifra exacta, de 259 personas, provino de una investigación realizada por miembros de Los Institutos de Ciencias Médicas de Toda India, quienes analizaron reportes noticiosos entre octubre de 2011 y noviembre de 2017 para llegar a la cifra.
En el artículo se define a la muerte por selfie, o “selficidio”, como “cualquier muerte accidental producida mientras se intenta obtener o ver una selfie”.
Uno de los casos más sonados de 2018 fue el de un sujeto que se había detenido a orilla de carretera para atender el llamado de la naturaleza y casualmente terminó encontrándose con un oso. Por algún motivo decidió tomarse una fotografía con el animal y terminó muerto.
El estudio antes mencionado hace énfasis en el incremento de esta clase de muerte a la par de la popularización de redes sociales como Snapchat e Instagram. India es el país donde se ha presentado el mayor número de decesos relacionados con las selfies, con aproximadamente el 50% de todas las muertes. Rusia y Estados Unidos ocupan los siguientes lugares en el macabro podio. El estudio también señala que la mayoría de las víctimas eran personas menores de 30 años.
Los hombres figuran como mayoría en esta lista con 72.5%, y es que aunque las mujeres se tomen más selfies, el estudio apunta que los hombres son más propensos a ponerse en riesgo para obtener la fotografía ideal.
La causa principal de muerte por selfie fue el ahogamiento, que terminó representando al 70% de las 259 muertes. En la segunda posición de causas con 48 muertes aparecen los “accidentes de transporte”, tales como correr frente a un tren o pararse sobre las vías férreas. En el tercer lugar tenemos un empate entre muerte por caída y fuego con 48 decesos contabilizados. Otras casas de muerte por selfie son los animales, armas de fuego y electrocución. Curiosamente, los estadounidenses figuran en la primera posición de accidentes con armas de fuego, por individuos que se disparan mientras intentan posar con las armas.
Al final, la investigación señala que probablemente se tengan muchos más casos de muertes relacionadas con selfies, dado que muchos incidentes nunca son reportados.
La madre que obligó a su hija a beber ácido muriático para curarle el autismo.
Desgraciadamente, muchos merecedores de los premios Darwin terminan dañando a otras personas, como sucedió en el caso de esta mujer. En Indiana, Estados Unidos, un hombre acusó a su esposa de obligar a su hija a beber ácido clorhídrico supuestamente para “curar” su autismo.
Tras encontrar una “milagrosa solución mineral” en un grupo de Facebook, la mujer tomó la decisión de probarla en su propia hija autista. Siguiendo la receta agregó varias gotas de ácido clorhídrico y una solución con cloro para purificar agua a una bebida que preparó para su pequeña.
El padre mencionó que su esposa le confesó lo del brebaje varias semanas después de proporcionar la bebida a su hija. En ese momento, el hombre llamó a las autoridades y Servicios Infantiles decidió retirar a la pequeña de la vivienda.
La “milagrosa solución mineral” ha sido divulgada como una cura desde el año 2006, cuando apareció en un libro del cienciólogo Jim Humble. Se supone que cura todo un abanico de enfermedades, desde un resfriado común, pasando por la hepatitis y el autismo hasta cáncer y SIDA.
Los ciclistas que recorrían el mundo para demostrar la “amabilidad” humana y fueron asesinados por el Estado Islámico.
Tras renunciar a sus respectivos empleos en 2017, Lauren Geoghegan y su novio Jay Austin, ambos de 29 años de edad, se embarcaron en una aventura internacional de ciclismo. Ambos mantenían un blog cuya intención era demostrar que “los humanos son amables” y que la maldad es un “concepto ficticio”.
Desafortunadamente, a poco más de un año de emprendida su aventura terminaron muriendo a manos de miembros del Estados Islámico en Tayikistán junto con otros dos ciclistas, uno de Países Bajos y otro de Suiza. Mientras el grupo hacía la ruta por aquel país, repentinamente fueron abordados por cinco hombres que los atacaron con cuchillos hasta quitarles la vida.
Al principio, las autoridades de Tayikistán señalaron como responsables a un grupo local de separatistas islámicos; sin embargo, el Estado Islámico difundió una filmación del ataque al grupo y se adjudicó toda la responsabilidad.
Obviamente, el asesinato de Geoghegan y Austin es la antítesis de lo que pretendían demostrar con su viaje por el mundo. En una publicación que realizó la pareja unos días antes de morir, Austin confesó haber adoptado una nueva perspectiva positiva sobre el mundo durante sus viajes.
El chino que se tragó una cuchara en un desafío y vivió un año con el utensilio dentro.
Un ciudadano chino logró salir con vida de una cirugía en la que se le retiró una cuchara de 20 centímetros que estuvo alojada en su esófago durante aproximadamente un año. El hombre de 20 años, solamente referido como Sr. Zhang, había tragado el utensilio en 2017 como parte de un reto, según lo informado por el Hospital General Xinjiang Meikuang. Por increíble que parezca, la pieza metálica apenas produjo algo de incomodidad a Zhang, que la transportó al interior de su cuerpo durante varios meses sin ningún dolor relevante.
No sería hasta mediados de octubre del año pasado cuando, tras recibir un golpe en el pecho, empezó a sentir un dolor extraño y dificultad para respirar. Solo entonces decidió buscar ayuda médica profesional para, evidentemente, retirar la pieza metálica de su esófago.
Durante la endoscopia los médicos descubrieron la gloriosa cuchara de metal envuelta por una capa de mucosidad. El 22 de octubre, un equipo de tres médicos llevó a cabo la cirugía para retirar la cuchara al Sr. Zhang que se recuperó por completo y vio como todos sus síntomas se esfumaban.
El ladrón que acudió a una entrevista de trabajo en la estación de policía.
Alberto López es el merecedor de un premio Darwin por haberse presentado a una entrevista de trabajo en la misma estación de policía que lo buscaba para arrestarlo. Durante la entrevista para el Departamento de Policía de Cottonwood, los agentes se dieron cuenta de que López era el sujeto al que habían estado buscando durante más de un año, por lo que procedieron a arrestarlo por acusaciones de robo.
En 2016, López robó una sucursal de Bank of America donde trabajaba. El delito consistió en un robo hormiga que le permitió obtener US$5,000 en ganancias a lo largo de tres meses.
Tras el atraco, abandonó el empleo y se mudó al sur de Phoenix. En octubre de 2016, los funcionarios de Bank of America levantaron una denuncia donde acusaban a López de robar el dinero. Al principio intentaron establecer contacto, pero todo fue en vano, por lo que terminaron emitiendo una orden de arresto. Pese a la orden judicial y múltiples citatorios, Alberto no colaboró con la policía logrando evadir su captura durante más de un año.
Fue así que, en diciembre de 2017, Alberto López se postuló para un trabajo en el mismo departamento de policía que lo había estado buscando. Durante la rutinaria comprobación de antecedentes, los oficiales encontraron la orden de arresto para el hombre.
Una semana después, tras determinar una causa probable, la policía hizo una invitación a este ganador del premio Darwin a la estación, donde le hicieron una falsa entrevista. Cuando López llegó listo para empezar a trabajar, los oficiales le colocaron las esposas y lo enviaron tras las rejas.