Pequeños crustáceos de tres ojos aparecieron en un lago temporal del Monumento nacional Wupatki, en Flagstaff, Arizona. Aparentemente, eclosionaron de sus huevos tras una serie de lluvias torrenciales el pasado mes de julio.
Estos seres pertenecen al género Triops y con apenas 4 centímetros de longitud, pueden dormir por décadas en regiones desérticas. Cuando finalmente llueve, llegan a los lagos recién formados para madurar y depositar los huevos.
Las autoridades del lugar creen que esta nueva camada de crustáceos se originó tras varios monzones que acumularon grandes cantidades de agua en una estructura de la histórica región. De hecho, un visitante comunicó a los oficiales del Monumento nacional Wupatki la presencia de los extraños animales. Lauren Carter, oficial del lugar, dijo en una entrevista que al principio creyó se trataba de ranas que se refugiaban en pozos subterráneos durante los periodos de sequía. Pero, al investigar de cerca a los animales no les encontró parecido alguno con los renacuajos.
Incluso cuando tuvo uno de los crustáceos entre sus manos, seguía preguntándose de qué se trataba. Finalmente, recordó algunos informes sobre Triops que leyó mientras laboraba en el Parque nacional del Bosque Petrificado, al noroeste del estado. Solo entonces reconoció a los animales. Estos Triops, al igual que los seres del género Lepidurus, pertenecen a la familia Triopsidae.
Camarones dinosaurio.
En total, ambos géneros incluyen una docena de especies. Probablemente, la especie localizada en esta región de los Estados Unidos era la Triops longicaudatus. Que se caracteriza por habitar cuerpos de agua dulce en todas las regiones de América y por su vida relativamente corta. La historia evolutiva de estos animales es extensa, por lo que a menudo los refieren como «camarones dinosaurio». Los ancestros de los Triops evolucionaron hace 380 millones de años, durante el Devónico, y desde entonces su apariencia cambió muy poco.
Pero, como aún sufren algunas alteraciones, no se les puede considerar fósiles vivientes. «Cambiaron, evolucionaron. Pero su apariencia externa es muy similar a la que tenían hace millones de años», explica Carter. Los Triops localizados en el Monumento nacional Wupatki presentaban excelentes condiciones gracias a un corto e intenso periodo de lluvias en Flagstaff. Según los registros, solo durante julio se alcanzó el 55% de la precipitación anual promedio para la región.
Reproducción a cualquier costo.
Generalmente, estos crustáceos se aparean por reproducción sexual y sus huevos eclosionan en cuestión de horas. Pero, también son hermafroditas y cuentan con órganos sexuales masculinos y femeninos. Además, la partenogénesis permite a las hembras procrear óvulos no fertilizados.
Los Triops tienen una vida promedio de tres meses, pero la población que surgió en este lago temporal desapareció tras cuatro semanas. Probablemente, los Triops terminaron en la dieta de aves locales como los cuervos o atajacaminos. Se desconoce la cifra de crustáceos que llegaron a poner huevos, pero es probable que en el próximo monzón vuelvan a surgir.
Cortesia Marcia pellejos
No hay comentarios:
Publicar un comentario