¿Alguna vez has pensado si te gustaría ser sepultado con algo en particular? ¿Tal vez una fotografía para mantener cerca al amor de tu vida, o una carta de amor? ¿Algún recuerdo importante sin el que jamás podrías partir y deseas que esté contigo para siempre? Tal vez no puedas llevarlo al más allá, pero nadie dice nada sobre guardarlo en tu tumba.
10 – Bob Marley (1945 – 1981)
Este famoso jamaiquino que llegaría a convertirse en una leyenda del reggae murió a los 36 años víctima de un cáncer y fue sepultado con su guitarra roja Gibson Les Paul, un ejemplar de la Biblia y una porción de marihuana.
2 – Leonard Bernstein (1918 – 1990)
Este famoso compositor es la mente creativa en canciones inolvidables de musicales como West Side Story (Amor sin barreras) y On the Town (Un día en Nueva York). Bernstein se fue a la tumba con un centavo de la suerte, una batuta, una pieza de ámbar y un ejemplar de Alicia en el País de las Maravillas. Además, una copia de la Sinfonía n.º 5 de Gustav Mahler también acompaña a Bernstein, que idolatraba al director australiano.
3 – Ronnie Van Zant (1948 – 1977)
El cantante de Lynyrd Skynyrd murió a los 29 años cuando el avión que trasladaba a la banda y a miembros del staff se impactó en Mississippi. Van Zant fue sepultado en su natal Florida con su peculiar sombrero negro y su caña de pescar.
4 – Humphrey Bogart (1899 – 1957)
El popular actor fue cremado, pero sus cenizas fueron sepultadas con un silbato de oro que había regalado a su esposa, Lauren Bacall, algunos años antes. Este silbato tenía grabada la frase “si quieres cualquier cosa, simplemente silba”.
La oración es una referencia a una película que Bogart y Bacall estelarizaron juntos: Tener y no tener de 1944. El diálogo completo en la película es: “sabes que conmigo no debes actuar. No tienes que decir nada, y no tienes que hacer nada. Nada. Bueno, tal vez sólo silbar. ¿Sabes cómo hacerlo, o no, Steve? Simplemente debes juntar los labios y soplar”. Evidentemente, el diálogo era demasiado extenso como para grabarlo en un silbato de oro.
5 – William S. Burroughs (1914 – 1997)
Burroughs es reconocido por haber escrito algunas de las novelas más controversiales y celebradas del siglo XX, obras como El almuerzo desnudo y Yonqui. Tras dejar de existir en su residencia de Lawrence, en Kansas, Estados Unidos, este escritor de la Generación beat fue sepultado en su natal St. Louis con un revólver .38 completamente abastecido, un bastón de espada, un sombrero fedora y un cigarrillo de marihuana.
6 – George Burns (1896 – 1996)
El actor, comediante y cantante desarrolló una extensa carrera que abarcó varias generaciones. Algo característico en las fotografías donde aparece George Burns es que siempre lleva un puro, ya sea en la boca o en la mano. Cuando murió a la edad de 100 años, para nadie resultó sorpresa que se le sepultara con tres puros en uno de sus bolsillos.
7 – Andy Warhol.
El popular artista y cineasta fue sepultado con un frasco de perfume Estée Lauder. Tal vez no resulte tan sorprendente, pues el propio Warhol decía: “me encanta usar perfume. A veces, en las fiestas me escapó al tocador sólo para ver las colonias que tienen. Jamás veo otra cosa – no me gusta espiar – pero soy obsesivo por ver si tienen algún perfume oscuro que todavía no he probado, o un viejo favorito que no he olido en un largo tiempo. Si veo algo interesante, me resulta imposible evitar probarlo. Pero el resto de la noche, experimento paranoia de que el anfitrión o anfitriona me huelan y se den cuenta que el olor les resulta familiar”.
8 – Roald Dahl (1916 – 1990).
El escritor británico autor de Jim y el durazno gigante, Charlie y la fábrica de chocolate y un montón de otros clásicos de la literatura realmente amaba el chocolate. Dahl fue sepultado con algunas porciones de chocolate, vino borgoña, lápices, una sierra mecánica y algunos tacos de billar.
9 – Bela Lugosi (1882 – 1956)
El actor que será conocido por siempre como el primer Drácula fue sepultado vistiendo el disfraz completo de su personaje, incluida la capa. Lugosi intentó evadir la asociación que le hicieron con el habitante más terrorífico de Transilvania, pero jamás pudo lograrlo, y tuvo que interpretar papeles similares hasta el final de su vida.
10 – Harry Houdini (1874 – 1926)
El escapista más famoso de la historia murió a los 52 años tras sufrir una ruptura de apéndice. Houdini fue sepultado con un paquete de cartas escritas por su querida madre. El ataúd donde dispusieron el cuerpo fue el mismo que utilizó en uno de sus actos bajo el agua.