La funcionalidad de un producto depende de un buen diseño, que conquiste la vista del consumidor y al mismo tiempo oriente sobre su uso correcto. Pero, en este mundo hay individuos encargados de este proceso que aparentemente no conocen el sentido común. Claro, a menos que su intención expresa fuera convertir su trabajo en un mal chiste.
1 – A menos que seas peruano, nadie consideraría oportuno condimentar una paloma.
2 – Yo sólo espero que el papel salga limpio de las entrañas de Spider-Man.
3 – Si me preguntan, este logo es de alguna oficina relacionada con la violencia intrafamiliar.
4 – De verdad, el malnacido que hizo esto no merece la más mínima misericordia.
5 – Se trata de un hotel que lleva por nombre «Henry IV»… y les convendría muchísimo omitir las siglas.
6 – La peor idea del mundo: «¿y por qué no colocamos el dispensador de toallas justo encima del lavabo?».
7 – La silla se diseñó para subir la cabecera conforme el niño crezca, y nadie consideró que la princesa se vería extraña.
8 – Es un empaque para toallitas húmedas de una marca rusa… ni Rocco Siffredi resultó tan pervertido.
9 – ¿Es un bote de basura disfrazado de buzón de sugerencias?
10 – En un intento por crear conciencia contra el cáncer de mama, esta empresa buscaba teñir de rosa el agua de su fuente.
11 – WTF!
12 – ¿Pero qué rayos le sucede a este sujeto, es un psicópata?
13 – No tengo experiencia en marketing, pero supongo que esta no es forma de hacer campaña a una compañía aérea.
14 – Yo no sé, pero el sujeto de la foto padece algún retraso grave o el que autorizó es empaques un completo troll.