152 años después de que saliera a la luz "El origen del mundo", del francés Gustave Courbet, donde los pechos de una mujer se ven parcialmente pero su zona íntima por completo, al fin se anunció la identidad de la modelo.
Su primer propietario fue el diplomático turco-egipcio Jalil-Bey, posteriormente la pintura permaneció oculta durante muchos años hasta que en 1995 ingresó al Museo de Orsay de París, que describe el estudio del desnudo femenino de Courbet como "una audacia y una franqueza que le dan un poder de fascinación".
Pero el dato que hasta el momento pertenecía como secreto ha sido revelado: la modelo que posó para el artista es Constance Quéniaux, una bailarina de la Ópera de París amante de Khalil-Bey, que encargó el cuadro a Gustave Courbet.
Según informa ABC, el año en que Coubet pintó "El origen del mundo", Quéniaux tenía 34 años. Vivía de los hombres pero era lesbiana y se convirtió en mecenas de muchas amigas.
Foto: Tomada de Musée d'Orsay.