Un médico forense de Brandeburgo afirmó que por cada millón de alemanes que se masturban, dos mueren en la práctica debido al uso de técnicas para llegar al orgasmo que ponen en riesgo su vida.
En total, serían entre 80 y 100 hombres que fallecen anualmente por asfixia autoerótica y electrochoque, aunque es difícil tener una cantidad más precisa, ya que cuando los familiares encuentran los cuerpos en posturas comprometedoras, con frecuencia eliminan todas las evidencias para evitarle una última vergüenza a sus seres queridos.
"Además, si la policía ve que la causa de muerte es claramente accidental, el cadáver no se manda a forenses. Grave error porque la autoasfixia durante la masturbación causa que las personas pierdan la conciencia apenas en 30 segundos", explica el forense Harald Voss a Bild.