martes, 27 de febrero de 2018

híbrido humano-oveja (y no es un morenazi)

Un equipo de científicos en la Universidad de Stanford, Estados Unidos, introdujo de forma exitosa células humanas en un embrión de oveja permitiendo su desarrollo durante 28 días, antes de finalmente destruir al resultado. Contrario a la primera impresión que causa la noticia de un experimento como este, el plan de los investigadores no consiste en producir un ejército de híbridos humanos-oveja.

Animal oveja
El verdadero interés consiste en desarrollar una nueva técnica que podría revolucionar la medicina y beneficiar de forma inimaginable a los humanos: hacer posible el “cultivo” de órganos destinados a los humanos en animales, poniendo fin al problema de la poca oferta y enorme demanda en el área de los trasplantes. Evidentemente, esta posibilidad está muy distante y la investigación es el inicio de un largo camino.
Fabricadas en un laboratorio, estas quimeras – como se les conoce a los híbridos – compartirían 99% de las características de una oveja común. Sin embargo, un pequeño fragmento de la información contenida en sus células sería propiamente humana. Desarrollar órganos específicos en animales supone un auténtico reto, pero los investigadores muestran optimismo ante esta confirmación de que existe la posibilidad.

El uso de animales como bancos de órganos humanos.


Y no es la primera vez que se desarrollan embriones híbridos. El año pasado, investigadores del Instituto Salk, también estadounidense, crearon el primerembrión de cerdo con células humanas.
Celula humana hibrido animal
Gracias a las innovadoras y avanzadas técnicas de edición del genoma, el plan es desarrollar embriones de animales con determinadas características. Por ejemplo, algo que ya se logró fue manipular embriones de ovejas y cerdos para que anularán el desarrollo de un páncreas.
En el futuro, teóricamente sería posible introducir células humanas para estimular el crecimiento del órgano con las características propias de uno humano.
Aunque esta técnica para el desarrollo de órganos y los consecuentes trasplantes todavía son algo muy distante, hay otro tipo de inconvenientes a superar. El primero es el enorme riesgo de rechazo hacia el órgano trasplantado, y por otro lado tenemos las implicaciones éticas de esta técnica que no es bien vista por toda la comunidad científica.