Monica Riley se encuentra en el otro extremo de las mujeres que viven obsesionadas con una figura esbelta. Si bien esta texana es una modelo de tallas grandes, su principal objetivo en la vida es engordar hasta que no pueda moverse por sus propios medios.
Y está a punto de lograrlo. En la actualidad Riley pesa más de 300 kilogramos, pero su objetivo es alcanzar los 453 kg (1,000 lbs) y partir de ahí convertirse en la mujer más obesa del mundo. Además, hay alguien que la está impulsando a lograrlo, hablamos de su novio Sid Riley, que invierte todo su tiempo libre en cocinar para su amada y atascarla de comida a través de un embudo.
En una declaración pública hecha para Metro, Monica dijo sentirse como una reina con todo ese peso y que, más allá de todo, aún tiene la compañía de su amado. “Es nuestra fantasía sexual y hemos hablado mucho sobre el tema”, dice ella. Por su parte, Sid se prepara para lograr, dentro de poco, ayudar a su novia a levantarse del sofá cama.
El plan.
La mujer declara que después de comer en exceso va de una habitación a otra con la ayuda de su novio, que la hace rodar por el suelo. “Es un gran estímulo para ambos”, revela. También relató que han pensado en tener un hijo y asegura que desde su punto de vista no es muy difícil la crianza de un pequeño sin la facultad de moverse, aunque posiblemente contraten a una sirvienta para que los ayude. “Tengo la certeza de que seremos buenos padres”.
En lo que respecta a su obesidad mórbida, el tema no es novedad para Monica, que desde muy temprana edad ha padecido sobrepeso. Hace un par de años consideró la posibilidad de someterse a una cirugía de reducción de estómago, pero de último momento renunció a la idea y tomó la decisión de engordar aún más.
Desde que conoció a Sid, hace cuatro meses, sostiene una dieta diaria de 8,000 calorías. Dice que entre más engorda, más sensual se siente, y atascarse el estómago con comida es algo que le provoca mucha excitación. El novio le da de comer todo el día y se asegura que no se levante para nada.
“Feederism”.
Su objetivo final es perder la movilidad, de forma que Sid se encargue de alimentarla, asearla y hacer prácticamente todo por ella. La madre de Monica está en contra de esta idea, así como muchos de sus conocidos. Monica comprende la preocupación de su madre, quien argumenta que su hija se está matando, pero ella se justifica diciendo que solo quiere ser feliz.
También declara que le preocupa muy poco perder su independencia, pues sabe que a Sid le gusta cuidar de ella y jamás dejará que sufra. Sid, que es un adepto a la práctica del “feederism”, un fetiche que hace que las personas sientan placer al engordar a sus parejas, dice que si Monica desea detenerse, él aceptará su decisión.
La alimentación de esta mujer incluye un galón de helado por día, panecillos, perros calientes, cereales azucarados, cuatro McChicken, cuatro hamburguesas doble queso, porciones grandes de papas fritas, 30 nuggets de pollo, macarrón con queso y tacos.
A ambos les gusta exhibirse en Internet, y Monica ya tiene una comunidad de 20 mil seguidores – la mayoría disfruta viéndola recibir comida por el embudo. Finalmente, Monica dice que no le importa morir pronto, lo único importante para ella es vivir su sueño de engordar cada vez más.