Al explorar esta docena de fotografías recopiladas de la historia, es fácil asimilar lo diferente que era la vida en el pasado. Las condiciones de vida, a menudo precarias, revelan rostros resignados al sufrimiento y el dolor. Por otro lado, están las fotografías que, sin un contexto adecuado, pasarían como meras tomas accidentales. Cuando realmente se trata de piezas históricas importantes.
Alumnos estadounidenses saludando a la bandera nacional en 1915.
Idéntico al de los nazis, este saludo llamado Bellamy se utilizó en los Estados Unidos mucho antes del Tercer Reich. Una vez que la Alemania nazi se volvió enemiga de los Estados Unidos, el saludo que se hacía durante el Juramento de Lealtad (Pledge of Allegiance) se cambió oficialmente.
El 1944, la inteligencia estadounidense elabora una serie de retratos con las “identidades” que podía asumir Hitler.
Es China en el año 1900, y un pirata de río acusado de multihomicidio espera su ejecución.
A este sujeto se le acusó de asesinar al menos a seis personas, incluida una víctima a la que le sacó los ojos. Los mantenían de pie sobre vigas de madera, y al final de cada día retiraban una. Como su cuello estaba asegurado en la parte superior, eventualmente quedaba colgando y moría estrangulado.
Una bomba globo hecha en Japón.
Ya bien entrada la Segunda Guerra Mundial, los japoneses colgaron bombas en globos similares a los atmosféricos y las dejaban a la deriva en la costa oeste de los Estados Unidos. El único dispositivo de esta clase que tuvo éxito mató a la esposa de un pastor y a cinco niños en un picnic dominical en Bly, Oregón.
Es 1850 y una mujer se retrata junto a una de sus niñas esclavas en Nuevo Orleans, Estados Unidos.
El carnet de identidad de Anny Horowitz, una niña francesa que murió asesinada en Auschwitz, en 1940.
Un pequeño muestra sus extremidades mutiladas a los misioneros en el Congo Belga de 1905.
La milicia estatal cortó sus extremidades como castigo después que la familia no cumpliera con la cuota de producción. Era un castigo extremadamente común en el Congo Belga, que en esa época se consideraba propiedad privada del rey Leopoldo II.
El menú que ofrecían a los prisioneros de Alcatraz en 1946.
La comida era tan buena en la prisión, que los custodios y el personal administrativo consumían exactamente los mismos platillos y porciones que los convictos. Tan distinguida atención se debía a que el alcaide consideraba que una mala alimentación generaba problemas en la prisión.
Una turba se burla de un par de mujeres con la cabeza rapada.
Es 1944, poco después de la liberación de Marsella, y las castigaron de esta forma por tener una relación con los nazis. Les dibujaban una esvástica en la frente, las dejaban en paños menores y finalmente las rapaban en una exhibición pública en el centro de la ciudad.
El pintor francés Pierre-Auguste Renoir, con evidente artritis, pinta flores en su jardín en 1910.
Una imagen promocional de “La brujería a través de los tiempos (Häxan)”, una película muda de 1922 de producción sueco-danesa.
Un tablero de Monopoly creado por prisioneros de guerra.
Los japoneses los retuvieron en Filipinas en el marco de la Segunda Guerra Mundial.
Nota Cortesia del Profe pato chairo
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