Imagina que eres de esas personas que se quedan a trabajar hasta tarde y terminas solo en el edificio donde se encuentra tu oficina. Mientras estás en el lugar, concentrado en terminar rápido el encargo para dirigirte a casa, empiezas a escuchar unos extraños ruidos provenientes de un largo y oscuro pasillo.
Parece que alguien está arrastrando cajas de cartón, pero tú sabes que no debería haber nadie más en ese lugar. Además, repentinamente empiezas a notar que la temperatura desciende a un frío congelante en la oficina. ¿Qué harías en medio de una situación cómo está?, ¿te armarías de valor y saldrías a enfrentar al gracioso que intenta asustarte?, ¿te harías bolita bajo el escritorio y llamarías a tu madre?, ¿telefonearías a los Caza fantasmas?
La hora del miedo.
Según lo publicado por Emilio Sánchez Hidalgo, de El País, un concejal de la pequeña ciudad de Vegas del Genil, situada en la región de Granada, en España, pasó por una experiencia similar a la que acabamos de describir mientras trabajaba a solas en el ayuntamiento a inicios de mes, e hizo lo más lógico en estas situaciones: tomó su teléfono celular y se dirigió a investigar el origen del ruido.
Sin embargo, como el teléfono celular de este sujeto no tenía la linterna de forma nativa, decidió empezar a tomar fotos para que el flash iluminara el pasillo. Fue entonces que capturó esta curiosa imagen:
¿Lograste ver esa pequeña silueta en medio del pasillo?, ¿no? ¡Tranquilo!, los muchachos de El País hicieron un acercamiento a la imagen y aumentaron un poco el contraste para que la sombra se hiciera un poco más visible. Échale un vistazo:
Bueno, tras analizar lo que la cámara de su celular había captado en el pasillo, el concejal entró en pánico. ¿Te imaginas lo que sucedió después? La otra cosa lógica que sucede en estos casos: la imagen fue inmediatamente enviada al grupo del ayuntamiento en WhatsApp y, como es debido, la foto se hizo viral en la ciudad en cuestión de minutos. Evidentemente, todo este asunto desencadenó una avalancha de rumores que están dando mucho de qué hablar.
Cazando al fantasma.
Según la versión de Leandro Martín, el alcalde de Vegas del Genil, la dichosa foto le llegó aproximadamente 3 horas después de que fue tomada y, según dice, le pareció un asunto bastante gracioso. Sin embargo, desde esa fecha varias personas que trabajan en el ayuntamiento empezaron a decir que también han escuchado cosas extrañas en el edificio.
Además, surgieron algunos rumores de que se había contratado a una médium para que despejara de ese lugar al alma en pena, e incluso identificar de quién era el espíritu. El recorte de un periódico que data de 1979 (también enviado por WhatsApp) da cuenta de la historia de una niña con una edad estimada entre los 6 y 8 años que habría sido localizada muerta en un colegio que se ubicaba exactamente en el sitio donde se construyó el ayuntamiento.
Según este recorte, el cadáver fue encontrado totalmente desnudo y con las manos atadas a la espalda, aquel caso cimbró a la pequeña comunidad española. Según la fecha de la noticia, el artículo se publicó el 15 de febrero (un viernes) por el periódico “Ideal”.
Noticias falsas.
El alcalde se mantiene bastante escéptico con relación a todo este chisme y dice que no hay ningún fantasma rondando los pasillos de su lugar de trabajo. Además, fue bastante rápido para esclarecer el misterio. Para empezar la vocera del ayuntamiento, una mujer llamada Mari Carmen Ros, relató que se encontraba estudiando en el colegio en ese año de 1979, que tenía 13 años de edad en aquella época y que jamás ocurrió un crimen en la institución educativa.
De la misma forma el supuesto recorte se trata de una noticia falsa – nada más hay que ver que la parte izquierda del recorte se encuentra escrita en inglés. El Ideal confirmó que dicho artículo jamás fue publicado por ellos, y el día 15 de febrero de 1979 fue un día jueves.
En lo que respecta a la supuesta intervención de una médium, el alcalde explicó que la prefectura contrató a una profesional de reiki que da clases a los habitantes en una de las salas del edificio y que, previo a cada sesión, la mujer purifica el local – pero esto no tiene absolutamente nada que ver con la presencia de un fantasma.
Sobre las variaciones en la temperatura, Martín dijo que jamás notó nada, a no ser que alguien de carne y hueso haya decidido alterar la calefacción.