El logotipo de cualquier marca o empresa tiene un efecto parecido al currículum, pues se trata de una tarjeta de presentación que guía al posible consumidor hasta el producto.
Sin embargo, las estrategias de marketing muchas veces van más allá y buscan captar la atención de los futuros clientes con mensajes subliminales, en su mayoría sexuales. Un objetivo cumplido.