Resulta hasta irónico que el hombre más rico del mundo, el mexicano Carlos Slim, venga proponiendo jornadas laborales de 3 días a la semana justamente en México, el país con la jornada laboral más grande y con el menor salario de la OCDE. Slim asegura que se aproxima el tiempo de un cambio profundo en la forma de trabajo, donde las personas ya no verán sus días de retiro a los 50 o 60 años, sino hasta los 70, laborando únicamente tres días a la semana y 11 horas por día.
Slim cree que los servicios públicos y particulares deben trabajar las 24 horas, pero las personas no. Esta declaraciones causaron un singular alboroto, quizá porque vengan de alguien que se encarga de emplear a millones de personas en el mundo, con reacciones que van desde el libertinaje, el asombro, la crítica hasta la incredulidad. Pero, ¿qué hay tras esta idea del hombre más rico del mundo?
No se trata de una simple ocurrencia, ni de una evolución lógica de las relaciones laborales. Tras esta conclusión está una consideración muy antigua del trabajo manual como señal de inferioridad que debe ser relegado a las máquinas, con lo que desaparecerían las clases marginadas, quizá como un proceso evolutivo de extinción.
Todo tiene base en una idea muy simple, si no es posible contratar a alguien que trabaje jornadas de once horas durante seis días porque se darían las circunstancias de explotación inhumana, entonces lo mejor es contratar a dos que trabaje tres días, reduciendo el desempleo a la mitad, aunque nadie sabe lo que pasará con los salarios… ni con los trabajos dobles.
Durante su ponencia en un reciente foro organizada por el Círculo de Montevideo, Carlos Slim dijo que no ve otra posibilidad a corto plazo.
“No conozco otra forma de combatir la pobreza en el mundo”.
Es imposible saber si esta propuesta, de división de la explotación gracias a una mano de obra barata y abundante, tendría las mismas consecuencias en un país desarrollado que en un país en vías de desarrollo, pero para poder comparar por ti mismo si se trata de una propuesta, una burla o una profecía, te presentamos a los 10 países con las jornadas laborales más reducidas del mundo, baso en un estudio de Society at Glance, de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico (OCDE).
10. Italia: La jornada laboral promedio es de 36 horas a la semana, pese a que la jornada laboral máxima indique 40 horas. El salario promedio de los trabajadores en Italia es de 2,900 dólares, y cuentan con cuatro semanas de vacaciones al año.
9. Australia: Quien trabaja en la iniciativa privada tiene jornadas de 36 horas semanales, sin embargo, los trabajadores públicos laboran 38 horas. El promedio salarial es de 3,750 dólares al mes.
8. Suecia: En promedio trabajan 36 horas a la semana, y la media salarial alcanza los 3,200 dólares al mes.
7. Bélgica: Trabajan un promedio de 35 horas a la semana, el promedio de salario belga alcanza los 3,700 dólares mensuales.
6. Suiza: El promedio de horas laborales es de 35, con una media salarial mensual de 4,200 dólares.
5. Alemania: Tienen un promedio de 35 horas laborales por persona a la semana con un salario mensual de 4,200 dólares.
4. Irlanda: Entre 1983 y 2012 el promedio de horas de trabajo por persona en Irlanda pasó de 44 a 34, con una percepción salarial mensual de 4,300 dólares.
3. Noruega: De la misma forma que Dinamarca, el promedio de horas laborales a la semana es de 33, los trabajadores cuentan con un mínimo de 21 días de vacaciones y las licencias por maternidad llegan a las 43 semanas, con salarios que en promedio suman los 3,800 dólares.
2. Dinamarca: En promedio se trabaja 33 horas por semana, su cultura laboral es muy flexible pues cuentan con seguro de desempleo que puede ser extendido hasta por dos años. El salario mensual alcanza los 3,800 dólares.
1. Holanda: Los holandeses tienen un promedio salarial mensual de 3,900 dólares por personas, la jornada laboral por semana es de 29 horas, con notables beneficios para las madres trabajadoras, que llegan a tener jornadas laborales de 4 días a la semana.
Nota: Los salarios están en dólares estadounidenses.
Benditas Reformas Laborales, cada día beneficiando más a los mexicanos.