lunes, 8 de mayo de 2017

La historia de la diversidad canina revelada

Un árbol genealógico con más de 160 razas de perros revela la historia oculta de la diversidad canina. Un grupo de investigadores examinó el genoma de 1346 animales para elaborar uno de los mapas genéticos más completos que traza la relación entre las diferentes razas.
perros tiernos
En este mapa se revelan los tipos de perros que cruzaron las personas para dar origen a las razas modernas, y también muestra que los animales criados para desempeñar funciones específicas, como la caza y el pastoreo, no necesariamente comparten los mismos orígenes. Este análisis también sugiere un tipo de perro antiguo que pudo haber llegado a las Américas miles de años antes que Cristóbal Colón.

Múltiples orígenes.

Este nuevo estudio podría resultar inesperado para los propietarios y criadores de perros, muy familiarizados con su clasificación en categorías.
“Uno pensaría que todos los perros criados para el pastoreo están relacionados, pero de ninguna forma es el caso”, explica Heidi Parker, bióloga e investigadora en los Institutos Nacionales de Salud de los Estados Unidos (NIH).
Cuando los genetistas procuraron trazar linajes de pastores en el pasado, no pudieron lograrlo con precisión. Parker, al lado de su colega Elaine Ostrander, explica que los perros de pastoreo aparecieron mediante cruzas selectivas en múltiples ocasiones y en diversos lugares.
pastor aleman perros en casa
“En retrospectiva, esto tiene sentido”, complementa Ostrander. “Las cualidades que se buscan en un perro que pastorea bisontes son diferentes a las de los perros que pastorean cabras, diferentes a los que pastorean ovejas, y así sucesivamente”.

Los perros en el continente americano.


La mayoría de las razas en este estudio surgieron en grupos de perros provenientes de Europa y Asia. Sin embargo, se descubrió que los perros domésticos llegaron al continente americano miles de años antes, cuando un grupo de nómadas atravesó el estrecho de Bering que conecta a Alaska y Siberia.
Estos “perros del Nuevo Mundo” desaparecieron cuando los perros europeos y asiáticos arribaron al continente americano. Los investigadores han buscado el legado genético de esos antiguos​caninos en el ADN de las razas modernas, pero se ha obtenido muy poca evidencia.
Xoloitzcuintle perro mexico
La forma en que dos razas americanas, el perro sin pelo del Perú y el xoloitzcuintle mexicano, se agrupan en el árbol genealógico sugiere para Ostrander y Parker que estos animales podrían compartir genes no encontrados en ninguna de las otras razas del análisis. Estos genes pudieron haber provenido de perros que habitaban América antes de la llegada de Colón.

Los periodos históricos importantes.

“Creo que nuestra visión sobre la formación de razas modernas de perros ha sido históricamente unidimensional”, explica Bob Wayne, biólogo evolutivo de la Universidad de California, en Los Angeles. “No tomamos en cuenta que el proceso tiene un legado histórico profundo”.
Esto se extiende a lo que probablemente fue el primer periodo de domesticación canina, en una época donde existían los cazadores-recolectores. Ostrander y Parker creen que las razas de perros pasaron por dos períodos principales de diversificación: uno que sucedió miles de años en el pasado, cuando los seleccionaron por sus habilidades y destrezas, y el otro hace apenas unos siglos, cuando se criaron siguiendo determinados rasgos físicos.
dalmata perro en calle

Importancia en la actualidad.

Aunque este estudio pueda ser de ayuda para que los investigadores entiendan mejor la historia del perro doméstico, hay muchas razones prácticas para crear una base de datos con los resultados de Ostrander, Parker y sus colegas.
Una de las razones es que podría resultar de utilidad para el diagnóstico de enfermedades en perros domésticos. Otra es que puede servir de guía en el estudio de enfermedades humanas.
Los perros y las personas padecen condiciones semejantes, como la epilepsia. En los seres humanos se tienen cientos de genes que pueden promover esta enfermedad. Sin embargo, dado que las razas de perros están genéticamente aisladas, cada una puede tener apenas uno o dos genes involucrados con la epilepsia. Así, estudiar a los perros permite una mirada individual y más eficiente sobre cada gen.