Más irrisorio se volvió este episodio cuando el anciano fue presentando ante el Ministerio Público de la localidad, que lo dejó en libertad bajo la justificación de que los padres “pueden hacer lo que quieran con sus hijos”.
Según se informó en el rotativo Quadratín, una mujer que transitaba por el lugar observó cuando Walter Zuk besaba a una de las pequeñas en la oreja, tras comentarle la situación a su esposo ambos atestiguaron el momento en que el anciano dio besos en la boca a una de las pequeñas.
Como era lógico, los ciudadanos se indignaron e inmediatamente empezaron a grabar para tener pruebas y denunciarlos a las autoridades, aunque antes decidieron preguntarle al sujeto sobre sus motivos y su relación con las pequeñas.
El denunciante, que grabó el video y prefirió mantenerse en el anonimato, aseguró que el padre de las menores le comentó que permitía la situación pues “tenían tiempo de conocerse”, y supuestamente el extranjero les apoyaba con “despensas”.
Después de esto, el hombre denunció los hechos a una patrulla de la Policía Federal que vigilaba la zona. Los agentes del orden remitieron al anciano y a los padres al Ministerio Público, pero una vez ahí la autoridad (in)competente concedió libertad a todas las partes al considerar que no había ningún delito.
Afortunadamente, la Fiscalía General del Estado de Guerrero logró reaprender a Walter Suk y abrir una averiguación previa por los posibles delitos de abuso sexual de personas menores. Al menos así se dio a conocer en un comunicado.
Este es un claro ejemplo del paraíso sexual en que se han convertido los destinos turísticos de México para los pedófilos extranjeros. ¿Ya nadie se acuerda del Gober Precioso y sus botellas de coñac?
Dicen que al acapulchango Pato Lucas tambien el canadiense le daba cariño a cambio de una despensa de Aurrera...dicen xDJ BUZON DE SUGERENCIAS C