La invención de la rueda se considera un momento crucial en la historia de la humanidad, pero los detalles que rodean su descubrimiento están envueltos en misterio. No existe un consenso académico sobre cuestiones clave como dónde, cómo y quién inventó originalmente la rueda. Un reciente estudio sugiere que este avance tecnológico, que revolucionó todo, tuvo lugar en las minas de cobre hace casi 6000 años.
La rueda es uno de los avances tecnológicos más importantes de la humanidad, pero su origen aún es un tema de debate. Una de las teorías más aceptadas sitúa su origen en Mesopotamia alrededor del 4000 a. C. y desde ahí llega a Europa. Otras más apuntan a la costa póntica, en el norte de Turquía, hacia el 3800 a. C., mientras que una más reciente ubica su invención en los montes Cárpatos entre el 4000 y el 3500 a. C.
El nuevo estudio respalda esta última teoría, propuesta en 2016 por el historiador Richard Bulliet. Esta plantea que la rueda probablemente fue inventada por mineros neolíticos que extraían mineral de cobre de los montes Cárpatos ya en el año 3900 a. C. Los investigadores proponen una trayectoria probable a lo largo de la cual la rueda evolucionó a través de tres innovaciones importantes.
«Nuestro análisis proporciona nuevas pruebas que respaldan la teoría recientemente presentada», señalan los investigadores en la revista Royal Society Open Science. «Mostramos cómo el descubrimiento de la rueda fue posible gracias a las características físicas únicas del entorno de la mina, cuyo impacto fue análogo a las presiones ambientales selectivas que impulsan la evolución biológica».
Todo inició con un rodillo
Las tres innovaciones por las que atravesó la rueda inició con la necesidad de mover una caja, según el estudio. Es probable que la gente utilizara rodillos colocados a lo largo de un camino para mover los objetos. Los rodillos traseros se iban moviendo hacia adelante hasta terminar el traslado.
En la primera innovación, rodillos ranurados permitieron que la caja se desplazara sin necesidad de moverlos uno a uno constantemente. Esto facilitó el empuje de carros más anchos dentro de las minas. La segunda innovación llegó con un conjunto de ruedas fijadas a un eje, lo que otorgó al carro mayor distancia del suelo para pasar sobre rocas y escombros. En la tercera innovación, las ruedas giraban de manera independiente del eje. Este avance surgió aproximadamente 500 años después y mejoró considerablemente el uso de los carros.
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