sábado, 24 de septiembre de 2016

Se le atora testículo en silla y salta a la fama



No damos crédito a la historia de Claus Jørstad, un noruego de 45 años que saltó a la fama gracias a que uno de sus testículos se quedó atorado en una silla.

Si, jamás había sido tan fácil convertirse en una celebridad. El hombre compró un asiento especial debido a que tiene una lesión en la rodilla y necesitaba bañarse sentado.

Sin embargo, cuando estaba bajo el agua, lo que él denomina como uno de sus "marineros" se quedó atorado en un agujero de la silla. 

Todo el baño iba perfecto hasta que intentó levantarse y simplemente no pudo. El dolor que sintió en ese momento fue insoportable e incluso pensó en echarse agua fría para encoger a su "marinero".

El mueble era de la famosa empresa 'Ikea', que recibió una jocosa publicación por parte de Claus, misma que contestó con el mismo humor y le recomendó colocar una cubierta en la silla para que su testículo no vuelva a salir perjudicado.